miércoles, 9 de septiembre de 2009

diagnostico de la realidad mundial y local: el fenomeno de la Globalización



Diagnostico de la realidad Mundial, Latinoamericana, y sus proyecciones futuras.
Impacto de la Globalización en las sociedades Modernas: Las dos caras de la mundialización.

En el presente artículo se plantearan las problemáticas actuales relacionadas con el nuevo fenómeno que denominamos globalización, se expondrá que la globalización es un fenómeno moderno que ha cambiado las estructuras y organizaciones sociales del mundo actual, ha traído cambios importantes a nivel mundial, logrando que nuestras sociedades contemporáneas se vuelvan cada día más complejas. La pregunta es: ¿estamos todos preparados para el impacto de este proceso mundial?, ¿Qué pasa con las sociedades latinas?, ¿cómo se enfrentan a este fenómeno?

Pensar que la globalización, o mundialización (como también se le puede llamar) es un proceso fundamental y únicamente relacionado al ámbito económico es un error, ya que los cambios y transformaciones que este proceso ha realizado en las estructuras y organizaciones sociales que se han provocado a lo largo de los últimos años también han sido de un impacto importante a nivel mundial, dejarlos sin análisis seria negativo, ya que se dejaría de lado un factor importante que influye en los cambios sociales de todo el Mundo. Se han realizado transformaciones, a nivel de las identidades culturales de todas las regiones, en especial, en nuestros suelos latinoamericanos, los cuales han reaccionado con transformaciones provocadas por este proceso de mundialización, el cual se impone.
El impacto que provoca en las sociedades mundiales este fenómeno puede ser negativo, ya que daña los estados nacionales, en donde se provoca un conflicto importante en las identidades nacionales latinoamericanas las cuales nacieron gracias a un sentimiento de pertenencia importante de identidad nacional, de identidad de pertenencia hacia un estado, este articulo involucrara y tratara mucho este tema, ya que es importante analizar cómo es que los latinoamericanos hemos manejado este proceso.
Sin embargo, la mundialización también ha traído aspectos positivos para el Mundo, como por ejemplo el avance de la tecnología y la expansión del mercado a nivel mundial.
Una de las preguntas centrales que se intentara responder con este artículo es: ¿cuál es el precio que debemos pagar los latinoamericanos por sumergirnos en este proceso mundial?

Como trabajadores sociales es fundamental que manejemos este tema con seriedad, debido a que nuestro quehacer profesional será desarrollado en sociedades que han cambiado, que se han reformado junto con la transformación del mundo entero. Este fenómeno actual de mundialización ha cambiado la mentalidad y la identidad de las personas, las cuales serán nuestros sujetos de acción. El mundo ha cambiado y nosotros deberemos cambiar con el, transformarnos de modo que seamos personas críticas de la sociedad. Aprender sobre este tema y manejarlo es una herramienta que nos servirá mucho, para comprender cómo y por qué van cambiando las problemáticas de la gente.

Las dos caras de la Globalización: Un impacto negativo y positivo.

La mundialización es un fenómeno actual, que ha transformado nuestras modernas sociedades para bien pero también para mal, su impacto ha sido en muchos casos negativo, ya que se piensa que el Estado Nacional esta llamado a desaparecer.
La globalización ha logrado que la industria tenga una orientación mucho más mundial en la actualidad que hace un decenio, la tecnología empleada ha facilitado el movimiento de inversiones industriales, y con respecto a las transformaciones sociales es aún más destacable decir que la mentalidad de la población también se ha modificado, se ha direccionado al consumismo exacerbado, también de orientación mundial.
El Estado Nacional fue creado como un artefacto de los siglos XVIII y XIX que buscaba crear sentimientos de pertenencia, de un grupo de personas hacia un territorio determinado. Hoy la realidad es muy distinta, ya que se piensa que el Estado Nacional esta llamado a desaparecer, debido a que en la actualidad no es necesario el artefacto estatal - nacional para guiar las funciones de los mercados mundiales, ya que estos funcionan perfectamente por su cuenta, gracias a la mano invisible de mercado. Los Estados Nacionales se comienzan ha venir abajo, ya que en la actualidad no es necesario que cumplan el papel de creadores de mercado, sino mas bien tienden a estorbar en este proceso; por motivos de expansión del proceso de globalización, perdió el importante papel que tenia como unidad significativa de participación en la economía global. En este mundo sin fronteras estas unidades de tradición definidas en términos políticos tienen cada vez menos que aportar, y el problema fundamental radica en que se comienza a perder soberanía política, tiene menos libertad para hacer sus contribuciones, el Estado – Nacional se ha vuelto un mero figurante en la economía mundial. “América Latina se esta quedando sin proyectos nacionales. La perdida de control sobre las economías de cada país se manifiesta en la desaparición de la moneda propia (Ecuador, El Salvador) en sus devaluaciones frecuentes (Brasil, México, Perú, Venezuela) o en la fijación maníaca al dólar (Argentina). Las monedas llevan emblemas nacionales, pero ya representan poco la capacidad de las naciones de gestionar soberanamente su presente” (García Canclini; Año 1980; Página 25)
Con respecto a la soberanía económica los Estado – Nación se comienzan a forjar como falacias manifiestas, ya que aunque mantienen cierto poder político, su soberanía en cuanto a decisiones propias se ven limitadas por las políticas exteriores. El Estado – Nacional comienza a volverse una ficción nostálgica, y se infiere que lo antes mencionado (la perdida de soberanía política) es uno de los costes de sumergirnos en un proceso de Mundialización de tal envergadura. “El proceso de globalización empezó expandiendo a las naciones – estado por todo el mundo, pero terminó por socavar su independencia. Esto se debe en parte a la creciente internacionalización de la economía y al surgimiento de bloques comerciales y políticos como la Comunidad Europea, lo que hace cada vez más difícil para las naciones seguir políticas significativamente diferentes a las del resto del mundo o de su grupo” (Jorge Larraín; Año 2004; Página 46).
El impacto de la globalización ha sido enorme, la vieja cartografía ya no sirve, no es más que una ilusión, ya que el mundo comienza a derribar fronteras.
La globalización no tan solo ha transformado los Estados Nacionales, de la forma antes mencionada, sino también a generado una expansión importante de la democracia liberal, por lo cual se podría pensar que es un hito positivo para el mundo, ya que tal cual como lo proclaman las Naciones Unidas, la democracia que se intenta implantar a nivel mundial, es una democracia participativa y representativa. De esta forma Saffirio plantea, que “…lo único indiscutido en materia de regimenes políticos es el principio de legitimidad. Nadie discute hoy en día que para gobernar se requiere el consenso ciudadano y para ejercer el poder se deben respetar los derechos humanos y los principios y normas del Estado democrático de Derecho” (Eduardo Saffirio: Año 2001; página 14). Es por esto que se piensa que el sistema democrático liberal también se ha visto globalizado.
La mundialización es un fenómeno irreversible, que se impone a todas las sociedades, el quedar fuera es un riesgo que muchas naciones evitan correr, ya que contiene elementos muy positivos para una mejor calidad de vida humana, debido a que la tecnología, ha llegado a prácticamente casi todos los rincones del mundo, el mercado se ha expandido, y algunos piensan que el capitalismo y la ciencia están transformando el mundo de forma muy benéfica. “…los análisis de Comblin, Higgott, Phillips, Newell, Quijano y Bauman no consideran suficientemente algunos elementos positivos de la globalización que tienen un carácter más universal, como por ejemplo la extensión de los medios de comunicación y entretención hasta las capas más pobres en ciertos países, las nuevas posibilidades de aprendizaje a través de Internet, el acceso creciente a una medicina exitosa en combatir males masivos (el SIDA, por ejemplo); los esfuerzos por introducir marcos legales y controles internacionales, por ejemplo en el caso de los derechos humanos (la propia detención de Pinochet en Londres habría sido imposible sin ellos); las campañas internacionales de protección del medio ambiente, la integración regional y la creación de Mercado comunes como la Unión Europea y el MERCOSUR, la disminución de nacionalismos estrechos en América Latina, etc.” (Jorge Larraín; Año 2005; página 78)
Sin embargo el impacto negativo que se ha provocado con este fenómeno ha sido también muy grande. Uno de los problemas que se han generado en los últimos decenios ha sido la distribución asimétrica de la riqueza, del avance científico – tecnológico y de la calidad de vida entre los países ricos y los países subdesarrollados.”Al estudiar movimientos recientes de globalización advertimos que estos no solo integran y generan mestizajes, también segregan. Producen nuevas desigualdades y estimulan reacciones diferencialistas” (Appadurai, 1996; Beck, 1997; Hannerz, 1996 En: Cultura híbridas. Estrategias para entrar y salir de la modernidad; Año 1980; Página 24).
Peor aún se podría decir que las brechas sociales se han incrementado entre los distintos países, ya que la integración de la economía a un sistema mundial provoca un impacto negativo en los países menos desarrollados, marginando a los países más débiles del sistema de desarrollo mundial, lo cual podría ser tremendamente perjudicial para sus naciones. “Para algunos como Bauman, los efectos positivos y los negativos no se distribuyen equitativamente en el mundo sino que conducen a una nueva polarización de ricos globalizados y pobres localizados” (Jorge Larraín; Año 2004, página 42).
La globalización es un fenómeno cada vez más creciente, y la liberación económica ha desencadenado una competencia feroz tanto al interior de los países así como entre ellos. A pesar de todo se han extendido las autocracias, y las desigualdades entre las sociedades se han acrecentado, al igual que la pobreza extrema.
El sentimiento de amor a la patria se ha perdido, es por esto que las naciones se han debilitado, el patriotismo va desapareciendo, y ya no es un rasgo característico de las identidades de las personas. Se piensa que el Estado – Nación comienza a morir, debido a que la nación como rasgo identitario de las sociedades, como sentimiento de pertenencia a un territorio, una lengua, una cultura, una historia, un común entre las personas, comienza poco a poco ha desaparecer, en este mundo que ya no tiene fronteras. “La identidad nacional ha sido especialmente afectada debido a la erosión de la autonomía de las naciones – estado” (Jorge Larraín; Año 2004; Páginas 45, 46)
Como consecuencia de este proceso de Mundialización el Estado deja de ser un poder absoluto, pierde autonomía política dentro de su propio territorio, pierde su carácter centralizador de decisiones colectivas al interior de su propia Nación. Los Estados en la actualidad, han tenido que adaptarse a las fuerzas de mercado internacionales, y en muchos casos, sobre todo en los países más débiles, como los son por ejemplo los países latinoamericanos, han tenido que subordinarse a esas fuerzas.
A pesar del gran debilitamiento de los Estados, estos deben seguir existiendo, ya que aparecen como el único contrapeso ciudadano y democrático ante el avance de las transnacionales, las cuales se imponen como un nuevo y secreto tipo de imperialismo indirecto.
En cuanto al impacto de la globalización en las mentalidades mundiales, se puede decir que los procesos globalizadores acentúan la interculturalidad moderna. Tienen un impacto importante a nivel de transformaciones identitarias y culturales, ya que se crean mercados mundiales, de intercambio de bienes materiales, y culturales. La mundialización ha permitido que las personas logren emigrar con más facilidad en el mundo. Los flujos de interacción que ocurren con este fenómeno disminuyen fronteras, e impactan las tradiciones locales en las regiones, propiciando la hibridación cultural. “En palabras de Beck, la globalización nos coloca ante el desafió de configurar una segunda modernidad, más reflexiva, que nos imponga su racionalidad secularizante sino que acepte pluralmente tradiciones diversas” (García Canclini; Año 1980; página 23).
La globalización a nivel mundial se ha impuesto con fuerza, y tal como dice García Canclini, este fenómeno puede ser visto como una dictadura homogeneizadora del mercado mundial.
El problema de la globalización es que los aspectos positivos y negativos de este proceso no se han distribuido equitativamente en el mundo. La globalización, a mundializado un sistema de desarrollo basado en el capitalismo salvaje, lo cual significa que el nivel de competitividad entre naciones se acrecenté, al igual que las diferencias sociales por la mala distribución de las riquezas y los recursos a nivel mundial. “La globalización en su encarnación actual de capitalismo informacional desregulado y competitivo, supera a los estados, pero articula a los segmentos dinámicos de las sociedades en todo el planeta, al tiempo que desconecta y margina a aquellos que no tienen otro valor que el de su vida” (Castells, Manuel; Globalización, identidad y Estado en América Latina; Año 1999,).
El neoliberalismo es un sistema económico y de desarrollo excluyente y egoísta, propicia el individualismo, destruye las sociedades, no cree en la justicia social, y convierte a las personas en seres consumistas. Sin embargo en este sentido el problema de la globalización, no es ella como fenómeno en si, si no más bien es el sistema económico y de desarrollo que se está implantando en todo el mundo, es él, el que esta provocando semejantes problemáticas mundiales. “El neoliberalismo no cree en la justicia social, rechaza la idea del bien común, absolutiza el mercado libre, se opone a los sindicatos como atentatorios a la libertad de la empresa” (Jorge Larraín; Año 2005; Página 80).
Con respecto a América Latina se puede decir que se ha transformado a medida que el mundo a cambiado, el impacto que ha tenido la globalización ha sido enorme, las naciones latinoamericanas como tal ya casi no existen, sus características identitarias más bien son la etnicidad, y el género. Los Estados han abandonado sus naciones para sumergirse en este proceso mundial que se ha impuesto. América Latina sigue sin desarrollarse, ya que su punto débil sigue siendo su baja capacidad tecnológica. A pesar de que se ha integrado a una economía global, su integración ha sido de forma desigual, con importantes costes, excluyendo a sectores sociales dentro de sus propias naciones. “América Latina esta integrada en la nueva economía global. Pero de forma desigual… El desarrollo desigual territorial se ha acentuado y la concentración de población y recursos en las grandes áreas metropolitanas sigue creciendo, suscitando tensiones sociales y deterioro medio – ambiental por falta de control y planeamiento de este proceso de urbanización acelerado. (Castells, Manuel: Globalización, identidad y Estado en América Latina; Año 1999)
Otro aspecto negativo de este proceso mundial, que ha influenciado al planeta entero a adoptar un sistema de economía y desarrollo basado en una dinámica destructiva de competitividad es que se ha provocado un deterioro masivo del medio ambiente, ya que la dinámica de este sistema no respeta ni a nuestro propio planeta. “Tanto en áreas rurales (Amazonía, Yucatán; delta del Orinoco; Bío – Bío y tantas otras) como en las periferias de las grandes metrópolis, se esta produciendo un deterioro irreversible del equilibrio ambiental que amenaza con degenerar en verdadero desastre ecológico” (Castells, Manuel: Globalización, identidad y Estado en América Latina; Año 1999).

En síntesis la globalización en un proceso mundial irreversible del cual no podemos escapar ya que se impone. Prácticamente todas, o casi todas las sociedades del mundo están inmersas en este proceso.
La mundialización es un fenómeno que impacta tanto positiva, así como negativamente al mundo, es por esto que se plantea las tesis de las dos caras de la globalización.
La mundialización es un proceso que complejiza aún más las relaciones sociales, debido a que provoca transformaciones de tremenda importancia en las relaciones sociales que afectan a todo el plantea. Aunque aporta aspectos positivos al mundo, como por ejemplo la tecnología avanzada, no se puede negar el gran impacto negativo que genera a nivel mundial.
La globalización no beneficia a todos por igual, las diferencias sociales a nivel mundial se han incrementado, mientras unos han obtenido grandes beneficios económicos, tecnológicos, médicos, educacionales, etc. otros han quedado marginados de los beneficios de este proceso. Se piensa que este fenómeno es un proceso fragmentado, que no beneficia a todos por igual. A pesar de que ha mejorado la calidad de vida a nivel planetario, se siguen generando exclusiones importantes dentro de la sociedad mundial, incluso dentro de las propias sociedades locales del plantea.
Sin embargo, el análisis realizado en este articulo apunta, y reflexiona sobre el cuidado que debemos tener al estudiar este fenómeno, ya que no podemos hablar de este proceso como un mero hecho negativo para el mundo, sino más bien se analiza que el problema no es la globalización en si, como fenómeno particular, ya que como Larraín plantea no se debe botar al niño de la bañera junto con el agua. El problema no es la globalización la cual ha beneficiado al mundo, sino más bien se debe decir que los conflictos han surgido del sistema económico y de desarrollo que se ha implantado a nivel mundial como un ente dogmático para los direccionamientos y lineamientos de trabajo de los Estados de todo el mundo. El Neoliberalismo es un sistema excluyente que genera constantemente competitividad entre las personas, olvidándose del bien común. La sociedad se ha empobrecido en valores, el Capitalismo a través de los procesos globalizadores ha generado en la población mundial un nuevo sentir que direcciona sus vidas, el “consumismo”. El Neoliberalismo propicia la individualidad, y la gente comienza a olvidar que todos vivimos juntos, es por esto que se han generado problemáticas de desigualdad social, y desastres medio ambientales.
El impacto que sí, podría atribuírsele a este proceso podrían ser los conflictos identitarios de las poblaciones mundiales. Las identidades de las personas se han transformado, junto con su mentalidad, su forma de ver el mundo, y la vida. Años atrás cerca de los siglos XVIII y XIX las identidades nacionales se vieron reforzadas (sobre todo en los países latinos), ya que sus Estados buscaron la forma de crear en sus poblaciones, sentimientos de pertenencia a un territorio, a una nación determinada, para poder tener un cimiento en donde implantar los proyectos estatales de aquellos años, para poder forjar los respectivos aparatos de poder correspondientes. Es por esto que durante mucho tiempo las identidades latinoamericanas se basaron en el patriotismo, sin embargo con las transformaciones que la mundialización ha traído, en la actualidad las identidades de las personas se han reformado y trasformado a identidades étnicas o de género. La identidad nacional esta desapareciendo debido al impacto de los procesos globalizadores. Las naciones fueron abandonadas por sus Estados, lo cual transformo las sociedades enteras.
Sin duda la globalización ha traído consigo problemáticas a las naciones más débiles del planeta, aquellas que estaban en condición de subdesarrollo, e incluso aquellos que se encuentran en vías de desarrollo han sido las que más problemas han tenido para implantarse en un sistema de esta envergadura. Los países latinoamericanos, junto con todos los demás países del llamado tercer mundo, no se encuentran en las mismas condiciones que los países desarrollados para enfrentar este actual proceso de desarrollo, esto ha generado problemáticas en nuestros países, los cuales se presentan con mas debilidades para enfrentar el sistema globalizado, ya que se han debido subordinar a un dominio indirecto de las potencias mundiales, las cuales tienen gran parte del control de sistema mundial de desarrollo, el cual ha sido expandido gracias a la globalización.
Nosotros como profesionales sociales debemos tener conocimiento de los impactos que provoca este fenómeno en la realidad del mundo, debemos tener claro que el concepto de sociedad se ha transformado debido a un proceso de globalización que ha derribado fronteras, para bien o para mal es una realidad tangible, y es necesario que como profesionales del Trabajo Social, nos encontremos con las herramientas necesarias para afrontar la realidad contemporánea del mundo, desde nuestro propio quehacer profesional.
Las sociedades se han transformado, ya no son las mismas de hace años atrás, debemos ser concientes de esto, tener el adecuado conocimiento, y la debida capacidad de comprender como impacta la historia mundial a las sociedades y a nuestro propia direccionamiento profesional.
La globalización trae consigo una paradoja indiscutida, debemos estar preparados para realizar un análisis objetivo del tema, es por esto que se plantea que la globalización ha provocado cambios positivos y negativos en el planeta. No debemos culpar solo a la globalización de las problemáticas e injusticias del mundo.

bibliografía.

La bibliografía obtenida para la argumentación del presente artículo se obtuvo de los siguientes autores, y sus respectivos textos:

Castells, Manuel: Globalización, identidad y Estado en América Latina. PNUD. Ciudad Santiago. Año 1999.

García Canclini, Néstor: “Culturas híbridas. Estrategias para entrar y salir de la modernidad”. Editorial Grijalbo. Ciudad México. Año 1980. Páginas 13 - 31

Larraín, Jorge: ¿América latina moderna? Capitulo III: Globalización, neoliberalismo y mercado. Editorial LOM, Ediciones. Ciudad Santiago. Año 2005. Páginas 61 – 83.

Saffirio Suárez, Eduardo: Estado Nación y Globalización. Centro de Estudios para el desarrollo, CED. Ciudad Santiago. Año 2001. Páginas 12 - 26.

Larraín, Jorge: “Identidad chilena”. Capitulo I: El concepto de Identidad, Identidad y mismidad. Editorial LOM, Ediciones. Ciudad Santiago. Año 2004. Páginas 21 – 48.